martes, 4 de agosto de 2009

Las camisetas que sí vende Florentino


Por John Wyatt
Bangkok (Tailandia)
Para rentabilizar el fichaje de Cristiano Ronaldo Florentino debe vender equipaciones a la mitad del planeta Tierra. Teniendo en cuenta de que sólo con China, Vietnam, Tailandia, La India, Birmania, Laos y Camboya ya se acerca al 50% de la población mundial, está bien que Floren insista en conquistar el mercado asiático. El problema es que, salvo en Japón, donde tienen más dinero y son más sibaritas, en el resto de países se venden camisetas de Cristiano, sí, a cascoporro, pero más falsas que judas. FNF lo ha comprobado en uno de esos puntos de venta de falsificaciones.

Finales de julio, mercado nocturno de Patpong, en el centro de Bangkok. A ambos lados de la calle, cientos de prostitutas jóvenes –uno no sabría diferenciar aquí a una chica de un travesti, ojo– esperan a sus clientes occidentales en la puerta de locales de mala reputación con una más que sobada barra americana y house de garrafón. Una legión de tailandeses ofrece al turista masajes con final feliz, un tuktuk para volver al hotel o asistir al espectáculo más célebre del barrio rojo de la capital tailandesa: el ping pong show. No asistí a ninguno, pero me hago una idea aproximada de lo que es. Y vosotros también.

El caso es que el epicentro del terremoto no es ese torrente de sexo de pago en sus más diversas formas, si no los puestos de falsificaciones. En Tailandia, como en China o en Birmania no es que haya un mercado de falsificaciones y los demás sean de productos ‘oficiales’. Es que todo lo que se compra y se vende son imitaciones más o menos logradas.

¿El truco? Muy sencillo: para abaratar costes, las grandes marcas fabrican en estos países. Las mismas fábricas que te hacen un bolso de Prada con destino Quinta Avenida de Nueva York te hacen la imitación porque conocen los materiales y los patrones originales. Clonan los logos, los acabados, todo. Menos el precio.

La estrella de aquel mercado y de todos los mercados de Asia es, sin duda, la camiseta blanca de Cristiano Ronaldo con el nueve a la espalda. Lo era en Patpong, en Chiang Mai, en Chiang Rai, en Chatuchang... ¿Su precio? Sin regatear, cinco euros. Regateando, vi vender alguna a 1,5 euros al cambio.

El material, los logos, las bandas laterales... no es imitación de la de Adidas, es otro original obtenido en la misma fábrica (o la de al lado) elegida por la casa de las tres bandas. El real Madrid asegura que vende 15 camisetas de Cristiano por minuto. Pero en todos aquellos tenderetes de falsificaciones, el ritmo de venta era más alto que en la esquina del Bernabéu.

El drama de Florentino es que el mercado asiático sí compra, a millones, camisetas de Cristiano, de Kaká y del resto de fichajes, pero ni la marca ni el Madrid ven un duro.

4 comentarios:

  1. Asumo que tampoco el Milan, Bayern o Inter recibirán un euro partido a la mitad. Imagino que tampoco el fichaje de Ibrahimovic por el Barca del que tanto se alegra Laporta recibirá un duro por ventas de camisetas en Asia.

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  2. Si es algo con lo que hay que contar, las falsificaciones, les pasa a todas las marcar de prestigio como es el Real Madrid.

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  3. Lo de las falsaficaciones es lo mas normal del mundo,no creo que florentino quiera pagar estos fichajes por vender camisetas,si no por el 50 % de derechos de imagen en anuncios que sera muy grande,y en asia es lo mas normal del mundo yo estube en vietnam y el sueldo medio es de 100 dolares¿creis que se gastarian el 85 % de su sueldo en una camisa...creo q no

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  4. Personalmente piense que, ya sea falso o imitación, estos dos métodos son buenos;
    Porque muchos fanáticos necesitan estos productos;
    Genuine es demasiado caro, no pueden pagarlo;

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